Integración: esa palabra que suena mágica

Bild von Scheila Santillan auf Pixabay
Bild von Scheila Santillan auf Pixabay

 

¿Qué significa estar “integrado”? Seguramente te lo has preguntado a ti mismo o te lo han preguntado alguna vez. ¿Significa que puedo hablar el idioma del país en dónde vivo? Si el idioma es el mismo, ¿significa que hablo con el mismo acento y palabras regionales? ¿Significa que puedo desarrollar mis actividades diarias sin necesidad de la ayuda de algún local? ¿O que tengo amigos locales más que otros expatriados? ¿Tal vez cuando me compre una casa o departamento en el barrio, ahí llegará la tan ansiada integración?

 

Yo veo la integración más que como un concepto estático y cuantificable, como un estado emocional y flexible. Nadie te puede decir que ya te has integrado si tú no lo sientes así y, por el contrario, no te pueden decir que no te has integrado, cuando tú sí lo experimentas. Por eso no hay recetas ni trucos para la integración. Lo que le funcionó a Maria no necesariamente le funcionará a José y viceversa.

 

Pero si hemos migrado y nos sentimos atascados como en una trampa sin salida, sintiéndonos fuera de lugar y preguntándonos si fue correcta la decisión, entonces sí que podría servirnos escuchar de las vivencias de otros que se sienten a gusto en su nuevo hogar. Probar nuevas estrategias para lograr el tan anhelado estado de “integrado”.

 

En mi caso logré sentirme así cuando encontré un trabajo que me gusta y relacionado a mi profesión aprendida. El entrar al mundo laboral alemán me abrió muchas puertas, no solo a la tranquilidad financiera y al desarrollo profesional, sino que me ayudó a sentirme parte de la sociedad, a conocer muchísimas aristas del funcionamiento del país, que no hubiese conocido si no trabajara. Mi autoestima se fortaleció pues con el tiempo aprendí a hablar mucho mejor el idioma a pesar de haberlo estudiado por meses, me sentí completamente independiente como en mi propio país y conocí muchos colegas, algunos que con el tiempo se convirtieron en amigos. La integración laboral significó para mí la última puerta (la grande) a la integración en Alemania.

 

Por cosas del destino –aunque suene un poco esotérico mi trabajo desde hace 6 años consiste en apoyar / acompañar / asesorar en el camino hacia la integración laboral a mujeres expatriadas y refugiadas de todo el mundo que viven en Alemania, más concretamente en Oberfranken, donde vivo yo. Entonces, he visto replicada mi propia experiencia de integración en aquellas mujeres que han encontrado un trabajo. Y me gusta la idea de poder acompañar a expatriados latinos en este camino también.

 

Ok. Entonces manos a la obra. A buscar un puesto y empezar a trabajar. Bueno, esto suena más fácil de lo que es, sobre todo en este país que, si bien te brinda muchas posibilidades, también te exige una cuota de formalidad y burocracia. Entonces encontrar trabajo ya no se reduce solo a buscar trabajo, encontrarlo y postularse. Integrarse laboralmente aquí implica en la mayoría de casos varios pasos paralelos o sucesivos. Primero y lo principal, aprender el idioma. Pero aprenderlo no como para poder comprar el pan sin riesgo a que te den un pan de papa si en realidad querías uno integral. El nivel de manejo del idioma requerido para poder ejercer una profesión es en la mayoría de casos mínimo de nivel intermedio. Ah y no nos olvidemos del vocabulario técnico.

 

Eso solo para empezar. Como no quiero sobrecargarlos en la primera entrada de este blog, solo mencionaré algunos de los aspectos que hay que tener en cuenta y que serán motivo de mis posteriores entradas: cómo buscar trabajo (si te dijeron que aquí todo funciona por internet pues déjame decirte que te informaron mal), cómo preparar la carpeta de solicitud de empleo, como escribir la carta de motivación/presentación, cómo es el proceso de selección, es necesario homologar el título, que tipos de reconocimiento de títulos existe, en dónde se hace cada uno, es necesario homologar el certificado de escuela básica si ya tengo una profesión o si quiero hacer una formación técnica, qué requisitos son necesarios para aprender una formación técnica, puedo aprender una profesión diferente a la que aprendí y trabajar en ella, qué opciones de formaciones técnicas o estudios universitarios existen, qué modalidades de trabajo existen y un largo largo etc.

 

¿Quieres saber más sobre alguno de esos temas? Entonces no dejes de pasar por aquí para leer la siguiente entrada de mi blog.

 

Hasta la próxima inspiración :)

 

www.coachalemania.com